WHDL - 00006527
Acerca del idioma del sitio
La WHDL se puede ver en varios idiomas. Utilice el menú desplegable para seleccionar un idioma para ver el sitio.
¿He cambiado mi idioma, pero sigo viendo los recursos en los otros idiomas?
Si un recurso o texto no ha sido traducido a su idioma seleccionado, aparecerá en el idioma añadido inicialmente. Siempre buscamos ayuda para traducir estos recursos. Si puede ayudar, ¡contáctenos
WHDL - 00006527
El altar ha sido siempre un punto de encuentro entre Dios y el hombre a fin de mantener y purificar la comunión entre ellos. Dios ha instituido esta relación en su pacto. En el altar el pueblo se entrega a sí mismo en sacrificio a Dios. San Pablo dijo en Romanos 12:1: “Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional”. En el altar aceptamos a Jesucristo como nuestro único Salvador, somos llenos del Espíritu Santo, también llevamos nuestras peticiones, hacemos votos de fidelidad, gratitud, y sentimos el llamado de Dios para un ministerio eficaz. Los grandes hombres de la Biblia usaron el altar como lugar de reconciliación o donde ofrecían sacrificio de alabanza y gratitud a Dios.